jueves, 18 de junio de 2015

CONSTRUYENDO REALIDADES EFÍMERAS (el trabajo de dirección de arte en una exposición)

El pasado jueves, 11 de junio, quedaba oficialmente inaugurada la nueva exposición temporal del Museo Arqueológico de Asturias. El resultado de años de trabajos, excavaciones y disputas, recopilado bajo en contundente nombre de "DOMVS".

Una vez elegidas las piezas y el hilo argumental, quedaba un importante trabajo por hacer, el de la dirección de arte. Y a mediados de febrero los chicos de kajota tuvimos el gran honor de poder presentar una propuesta a todo el equipo implicado en el asunto. Una propuesta de diseño que nace, como en todos nuestros trabajos, a raíz del concepto que elegimos como esencia y sustancia de todo el discurso. Y después de horas y días de documentación y debate, leyendo y releyendo ensayos y escritos sobre la Roma del siglo I d.C. y su presencia en la Asturias de aquel entonces, llegamos a la idea clave: la construcción de una nueva realidad sobre la existente.
Bocetos, garabatos y bolas de papel entre trabajos y cervezas. Así comienza esa labor que nos lleva a ese concepto que será eje central de nuestro trabajo y de la exposición completa. Igual que los romanos edificaron su civitas sobre el castro, nuestro trabajo de diseño se movería en varios niveles que se superpondrían. La idea central estaba elegida, ahora quedaba traducirlo en un lenguaje visual y empezar a dividir el contenido en bloques temáticos. Y algo igualmente complejo, presentarlo y hacerlo visible al equipo de trabajo... Afortunadamente, tras horas de estrés y nervios, la cosa salió rodada y el entendimiento fue perfecto. Ahora, siguiente fase, pasar de los bocetos 3D a las medidas reales.
Es una parte más tediosa y menos creativa pero, qué remedio, seguramente igual de importante (si no más) que el resto. De nada sirve crear lenguaje, discurso y concepto si después no podemos aplicarlo. Así que a medir, tocar, soplar y adaptarse a materiales, recursos y presupuestos. Ahí es cuando la creatividad se convierte en heurística, cuando solucionamos el problema al que nos enfrentamos de una manera original, adaptada a los recursos y de manera reproducible y medible. Toca dedicarse a la arquitectura efímera y empezar a traducir el concepto en imágenes y bocetos.
También toca descartar, redimensionar, corregir, replantear. Hay que tener cintura y una mente flexible y resolutiva. El papel todo lo aguanta, pero no las paredes y el DM. Queremos jugar con esa superposición de realidades convirtiéndolo en un juego de volúmenes, así que hay que adentrarse en el mundo de los corpóreos... para eso, siempre es bueno tener un colaborador de confianza.
Y así empezamos una fase mucho más siniestra y oscura, que lleva días. La de maquetar textos, preparar archivos para imprenta, decidir acabados, pinturas, materiales, dimensiones... Pero la hora de la verdad está cerca, y hay que ser fino y preciso, pues un error en la fase de producción y montaje es mucho más comprometido (irreversible a veces). Pero con la implicación de todas las partes, las piezas enseguida van encajando, pese a sorpresas y detalles que relucen en el tiempo de descuento. La cosa va tomando cuerpo, y volumen, hasta llegar la noche previa a la puesta de largo, donde (sin que sirva de precedente) todo encaja y luce debidamente. Y nos vemos cara a cara con el resultado:




Y totalmente satisfechos podemos dar por finalizado nuestro trabajo, una vez que confirmamos que está todo como pretendíamos. Vinilos, pegasus, dibond, metacrilatos, paredes técnicas, pinturas, tintas, troqueles, márgenes, espacios, disposiciones... Un trabajo de tres meses que lo que realmente busca es quedar en un tercer plano. Crear un entorno y un contexto. Ser un vehículo a través del que se articulan discursos y líneas de tiempo, siempre al servicio de la realidad que acoge, otorgando el protagonismo a las piezas expuestas y destacando la labor de arqueólogos/as y restauradores/as. Y así, a la mañana siguiente, uno llega a la inauguración orgulloso y tranquilo, deseando quedar detrás de los focos. Muchas gracias a A. y D. por la oportunidad y el esfuerzo.




DOMVS, una casa romana en el castro de Chao Samartín puede visitarse en el Museo Arqueológico de Asturias, en Oviedo, hasta finales de octubre. La entrada es gratuita. Bienvenidos a casa!